Primera
parte:
el madrij pedirá cuatro voluntarios y dirá a tres de ellos que se retiren
momentáneamente mientras el cuenta delante del grupo y de uno de los
voluntarios un cuento con muchos detalles (no se debe exagerar). Luego
entrará uno de los tres janijim que se encuentran fuera y el janij que
escuchó el cuento de boca del madrij será, esta vez, el encargado de repetir
el cuento. Después el segundo janij contará el cuento al tercero y
posteriormente el tercero al cuarto. Para finalizar el último de los janijim
debe contar el cuento delante de todo el grupo Obviamente, este omitirá gran
parte de los detalles.
Conclusión: las cosas se nos van olvidando.
Segunda parte:
el madrij repartirá una lista con veinte nombres u objetos que los janijim
deberán memorizar (hacerla antes de shabbat)
durante un minuto. Luego de este tiempo el madrij juntará las listas y
pedirá a los janijim que enumeren todo lo
que ellos recuerdan de esta lista. El juego pude ser llamado concurso de
memoria .
Es de suponer que los janijim no recordarán todo.
Tercera parte:
se pedirán dos voluntarios. Uno de ellos deberá contar una experiencia
fuerte que halla tenido,
luego, el segundo, repetirá la historia escuchada.
La repetición de la historia será menos emotiva, más seca y no llegará al
corazón como la primera versión.
Cuarta parte:
el madrij planteará un debate con la finalidad de explicar que lo que
nosotros no vemos o no
pasamos en carne propia nos es difícil de sentir en profundidad.
¿Cuanto, del cuento de la primera parte, recordaba el último de los janijim?
¿Y porqué?
¿Porqué los janijim no recordaron todos los objetos o las palabras?
¿Por qué el segundo de los cuentos no fue tan emotivo como el primero? |